Cáncer oral y tabaco


El Cáncer Oral y El Tabaco

¿Cuál es la relación entre el cáncer oral y el tabaco?
El consumo de tabaco es un factor de riesgo importante para el cáncer oral y otros tipos de cáncer. Todos los productos del tabaco, incluyendo los cigarrillos, los puros, el tabaco de pipa, el tabaco de mascar y el rapé, contienen toxinas (sustancias venenosas), carcinógenos (agentes causantes de cáncer) y nicotina (sustancia adictiva). Cada producto del tabaco está relacionado con un riesgo alto de cánceres específicos:

Cigarrillos Los cigarrillos, la forma en que se usa más corrientemente el tabaco, causan el 87 por ciento de todos los casos de cáncer del pulmón, según la Asociación Americana del Pulmón (American Lung Association). Además, los fumadores tienen seis veces más probabilidades de desarrollar alguna forma de cáncer en la cavidad oral que los no fumadores. Los cigarrillos contienen más de 43 agentes causantes de cáncer.
Puros y pipas Los puros y las pipas a menudo se consideran como la manera menos dañina de fumar tabaco. Sin embargo, aunque no inhalen el humo, los fumadores de puros y pipas tienen un riesgo elevado de desarrollar cáncer en la cavidad oral y en los pulmones. Los fumadores de pipas también tienen el riesgo elevado de padecer de cáncer del labio en las zonas donde descansa la pipa. Además, los puros demoran más en consumirse y contienen más tabaco que los cigarrillos, lo que aumenta la exposición al humo de segunda mano.

Fumar puros puede conducir a la pérdida de dientes, la pérdida del hueso de la mandíbula y a otras enfermedades periodontales.

Tabaco de mascar  y rapé El tabaco de escupir, también conocido como tabaco de mascar o rapé, son formas de tabaco que se colocan entre la mejilla y las encías. Se puede mascar tabaco en la forma de tabaco de hoja (que se empaqueta en bolsas) o de tabletas de tabaco (que se empaquetan en forma de "ladrillo"). El rapé es una forma de tabaco en polvo que usualmente se vende en latas. La nicotina es liberada del tabaco mientras el consumidor "mastica".

Aun cuando el tabaco de mascar y el tabaco en polvo se consideran productos de tabaco "sin humo", durante su consumo se ingieren productos químicos dañinos incluyendo la nicotina. Otros productos químicos que existen en el tabaco de mascar y en el polvo de tabaco son los siguientes:

  • Desechos nucleares.
     
  • Agentes causantes del cáncer (carcinogenos).
     
  • Formaldehído (normalmente utilizado para embalsamar cadáveres).
     
  • Productos químicos que se usan en las baterías de autos.
     
  • Cianuro (un tipo de veneno).
     
  • Arsénico.
     
  • Bencina.
     
  • Plomo.

El tabaco de mascar y el tabaco en polvo pueden causar cáncer en las mejillas, las encías y los labios. Como sucede al usar una pipa, el cáncer se desarrolla a menudo en la zona de la boca donde se coloca el tabaco. El cáncer causado por el tabaco "sin humo" a menudo comienza como leucoplasia (condición caracterizada por la presencia de una placa blanquecina que se desarrolla dentro de la boca o garganta) o eritroplasia (condición caracterizada por una placa roja y elevada que se desarrolla dentro de la boca). Otros problemas asociados con el tabaco de mascar y el tabaco en polvo incluyen las enfermedades periodontales, la descoloración de los dientes y el mal aliento, entre otros.

 

¿Cuál es la diferencia entre los cigarrillos y los puros?

En la década de los años 1990, los puros se pusieron de moda, atrayendo a personas de todas las edades. Aunque se consideran menos perjudiciales para la salud, en realidad los puros suponen el mismo riesgo que los cigarrillos para el cáncer de la boca, o incluso más. Aunque muchos fumadores de puros no inhalan el humo, el riesgo para el cáncer de la boca, garganta y esófago es el mismo que en los fumadores de cigarrillos. Tenga en cuenta lo siguiente:

  • Si se comparan con los no fumadores, las personas que fuman cigarros tienen 10 veces más la probabilidad de contraer cáncer oral, del esófago y de la laringe.

  • Los fumadores de cigarros pueden gastar hasta una hora fumando un cigarro grande, que podría tener la misma cantidad de nicotina que un paquete de cigarrillos. Además, aún los cigarros apagados, cuando se dejan en la boca por mucho tiempo, provocan la absorpción de la nicotina.

  • El humo de los puros que inhalan los fumadores pasivos contiene toxinas y sustancias que producen cáncer (sustancias cancerígenas) similares a las del humo que inhalan los fumadores pasivos de cigarrillos, aunque en mayores concentraciones.

Consejos para dejar de fumar para quienes consumen productos del tabaco:
La Academia Americana de la Otorrinolaringología (American Academy of Otolaryngology) y la Asociación Americana del Pulmón (American Lung Association) ofrecen una serie de consejos prácticos para conseguir dejar el tabaco: 

  • Piense por qué quiere dejarlo. 
  • Elija una temporada en la que no esté estresado para dejarlo.
  • Busque apoyo y ánimos en sus familiares, amigos y compañeros de trabajo.
  • Empiece a hacer algún ejercicio o actividad a diario para aliviar el estrés y mejorar su salud.
  • Descanse todo lo que sea necesario. Coma de forma equilibrada.
  • Únase a un programa para dejar de fumar o a algún grupo de apoyo.

Fuente: Methodist Health Care System, Houston, Tx.USA